martes, 17 de octubre de 2017

DE PLENA ACTUALIDAD

El cobro del Impuesto de Contaminación de las Aguas en Zaragoza ha puesto de plena actualidad al Instituto Aragonés del Agua, a su Consejería de referencia y a sus trabajadores que han intervenido en la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas.
Con respecto a la presentación a los medios del arranque de la campaña de cobro del ICA no hay grandes novedades. El Consejero sigue instalado en la contradictoria defensa del carácter ecológico del impuesto (el que contamina paga) y por eso hace pagar a quienes no contaminan. 
Pero no es esta la mayor contradicción. Para un observador que venga siguiendo la evolución del IAA y su próxima conversión a Dirección General, que conozca la situación pendiente del Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración, el informe de la Cámara de Cuentas o la (esperemos) próxima Comisión de Investigación Parlamentaria, le causará sorpresa que la Consejería actúe "cual si no pasara nada" .
La situación se resuelve en un mero ataque al Ayuntamiento de Zaragoza y una llamada a una solidaridad de difícil justificación cuando no se apoya en el conocimiento real y total de las actuaciones del IAA.
Cambiando de tema, aunque sin salir de este ajetreado día. La comparecencia de los trabajadores del IAA en la Comisión de las Cortes busca argumentar que se les considere funcionarios con todos derechos a personas que NO han opositado sino que realizaron un proceso de selección elaborado por empresas privadas. Hay que decir que todos estos años no han tenido una Relación de Puestos de Trabajo, donde los demás funcionarios de la DGA y cualquier ciudadano por ser su derecho (ley de transparencia) pudiera ver la plantilla, las forma de provisión, las competencias, los grupos y cuerpos, las titulaciones, los complementos o los niveles salariales.
No hemos visto nada de esto durante los años de existencia del IAA y nunca hemos visto a estos trabajadores solicitar que así fuera o que sus puestos de trabajo fueran el resultado de una oposición libre como en el resto de la administración general de la DGA.
Este anómalo traspaso de trabajadores genera sin duda, un agravio con un gran número de funcionarios interinos que también realizan desde hace muchos años su trabajo para la DGA. 
En la administración general, la falta de convocatorias de oposición ha echado por tierra la posibilidad de consolidar un puesto de trabajo a personas que tienen suficiente experiencia y formación. Incluso se ha provocado ceses de personal funcionario interino experto por no haber sacado los primeros puestos en durísimas oposiciones con muy escasas plazas. Si en el IAA se ha optado por esta solución,.. ¿por que no funcionarizar a interinos que no tienen culpa ninguna de que no se hayan sacado sus plazas a oposición y acumulan años y experiencias que no es tenida en cuenta en ningún proceso de oposición?,.... Dejamos las preguntas aquí porque en la Consejería de Educación también podrían aportar su opinión sobre las formas de acceso a la función pública y la realidad de los interinos.
Para finalizar este tema no podemos dejar de recordar la dura crítica que, a este blog, le ha merecido la gestión y actuaciones del IAA. No podemos dejar de considerar que, en buena medida, quienes hicieron posible el fiasco que hemos denunciado son los mismos que ahora se presentan como víctimas de una administración inmisericorde. Todo esto merecería un debate y un reposo que ni el IAA ni la Consejería de referencia parecen dispuestos a llevar a cabo. 
Estamos seguros que los zaragozanos están dispuestos a participar solidariamente con Aragón en el reparto de gastos y responsabilidades pero previo a eso hay muchas cosas que aclarar.


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