martes, 11 de agosto de 2020

PLAN PIRINEOS II DE DEPURACIÓN DE AGUA

La verdad es la verdad, la diga Agamenón o su porquero. A este aforismo Juan de Mairena le hace responder a Agamenon “estoy conforme” y al porquero “no me convence”.
El universo de sabiduría de Machado es tan rico que incluso lo podemos aplicar al Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración con el que convivimos buena parte de este siglo XXI. Y es que el discurso del rey y el del porquero pueden albergar verdad, pero el poder del primero le da mucha más capacidad de penetración social. La relación entre poder y verdad es muy interesante, mientras se ejerce el poder se trata de hacer valer las verdades propias y suelen rechazarse las ideas ajenas como falsas.
Cuando los medios de comunicación, la mayor parte a las órdenes de Agamenón, dicen "Arranca por  fin el Plan Pirineos II de depuración de agua”,reflejan una parte de una realidad que alude al inicio en fechas recientes de las obras de la estación depuradora de aguas de Ansó (2.648.875€), al comienzo en mayo de la EDAR de Sallent-Formigal (5.164.808€), a futuras inversiones en núcleos de similar número de habitantes y a la concesión de subvenciones para EDARs en núcleos de menor tamaño (7M€ para los dos próximas anualidades). 
Sin embargo evitan completar la información y contemplar el resto de la verdad que venimos explicando, como incómodos porqueros, desde esta red ciudadana y que una vez más traemos a este blog en este distópico verano.

No nos cansaremos de hacer notar que las nuevas EDARs se hubieran podido construir de acuerdo a un modelo de depuración que, sin dejar de ser eficaz, resultara más económico. Pero los servidores de Agamenón tienen la capacidad de convencer a todos que su verdad es superior a cualquier otra.
Al porquero, además de no estar de acuerdo y decirlo, le cabe la esperanza de que: “La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés”.

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