Sería deseable que esos partidos, ahora que el PASD debe someterse a revisión, materializaran la palabra comprometida y propusieran un documento que efectivamente "promueva una moratoria inmediata de cuantas acciones está previstas en el desarrollo del PASD, en tanto se desarrolla una auditoría económico-financiera y de viabilidad del Plan y del Instituto Aragonés del Agua, que permita revisar a la baja los costes del sistema aragonés de depuración".
Mientras tanto seguiremos aportando a la administración nuestras propuestas que hoy como ayer recuerdan que:
- La calidad de las aguas no depende solo de la depuración de los vertidos urbanos. También vierten las industrias y las granjas, las empresas turísticas (hoteles, campings, etc).
- Que la agricultura y la ganaderiaI, gualmente provocan una fuerte contaminacion conocida como difusa.
- Que la contaminación por nitratos (abonos, purines...) en Aragon es muy grave y se definen amplias zonas como saturadas.
- Que el nuevo Plan debería contemplar y legislar estos sectores (Industria, agricultura, ganadería, turismo,etc...).
- Que las normas ambientales establecen que lo prioritario es PREVENIR la contaminación. Es decir evitar que se genere, reducir en el origen, tanto la cantidad como la toxicidad o peligrosidad de los vertidos.
- Que una vez que algunos contaminantes están disueltos en el agua, es muy difícil y costoso retirarlos, como sucede con los COP,S compuestos orgánicos persistentes o con los disruptores endocrinos, por ejemplo.
Hay que considerar que las depuradoras NO hacen milagros, no son capaces de depurar determinadas sustancias y lo que hacen es transferir contaminación del agua a los fangos o lodos, con los que luego hay que hacer algo.
Cuantas mas depuradoras convencionales funcionen, mas lodos se producen y si los lodos no contienen metales pesados o COP,S (compuestos orgánicos persistentes) pueden emplearse en la agricultura o la repoblación forestal, pero las redes de vertidos donde todo va mezclado hacen difícil que los lodos no se contaminen.
Por todo ello es importante implementar objetivos y actuaciones de prevención y también de aumento y mejora de la capacidad de control de los vertidos así como incluir en la planificación qué hacer con los lodos o fangos.
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