El proceso de adjudicación de estos servicios a empresas
privadas, junto con la opacidad que envuelve todo el Plan y el colapso del
mismo, exigen una auditoría independiente bajo supervisión de los ayuntamientos
y de la ciudadanía.
A pesar de ser evidente que en el Plan se han sobredimensionado,
de forma injustificable, las depuradoras y se han ignorado tecnologías de
saneamiento biológico mucho más baratas y viables para el medio rural, los
ayuntamientos que se han negado a firmar el convenio de cesión de sus
competencias al Instituto Aragonés del Agua se han visto y se ven sometidos a presiones y amenazas.
Por último, denunciamos que, con la reforma de la Ley de
Régimen Local, lo que se pretende no es ahorrar, sino privatizar servicios municipales,
degradando la democracia local y la calidad de los servicios prestados por los
Ayuntamientos, en la medida que se transforma a los ciudadanos en clientes.
Por todo ello:
1- Llamamos a todos, ayuntamientos, movimientos,
colectivos, asociaciones, sindicatos y partidos políticos a celebrar el próximo
23 de Abril, Día de Aragón, como un día de lucha por la autonomía municipal y
la democracia participativa.
2- Pedimos una auditoría del Plan de Saneamiento y
Depuración de Aragón, para posteriormente proceder a una profunda revisión del mismo,
abierta a la participación de la ciudadanía y de los ayuntamientos.
3-
Exigimos que se adopten las medidas
administrativas y legales necesarias para que dejen de pagar el Canon de
Saneamiento y Depuración aquellos pueblos y ciudades donde ni siquiera se ha
construido la depuradora.
4- Ante el fiasco que ha supuesto el Plan en
cuestión, exigimos a la DGA una actitud responsable y respetuosa con los
ayuntamientos, especialmente con aquellos que demandan una rescisión del
convenio firmado o una renegociación de sus condiciones.
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