Los servicios del agua urbana son
un elemento esencial para la salud y el bienestar de los ciudadanos. La
Directiva Marco de Aguas, como ley básica europea, exige evitar, o cuando menos
depurar y sanear, todo tipo de vertidos, y en particular de los vertidos
urbanos.
Los Ayuntamientos, como
depositarios de las competencias en materia de agua y saneamiento, son
responsables de que la ciudadanía reciba aguas de calidad y servicios eficientes de saneamiento que preserven el buen estado
de nuestros ríos.
En Zaragoza la gestión del servicio
de abastecimiento ha sido y es pública. Con la potabilizadora de Casablanca,
que acaba de cumplir 50 años, el servicio merece calificarse como ejemplar durante
todo este tiempo. A pesar de ello, en 2003, el Partido Popular decidió
privatizarlo, decisión que se evitó gracias a la movilización de los
trabajadores y de la ciudadanía.
En lo que se refiere al servicio
de saneamiento, Zaragoza tiene dos depuradoras. La de la Cartuja se construyó y
se ha gestionado, bajo concesión privada, por la multinacional Veolia. Durante
el gobierno del Alcalde Belloch, se prorrogó el fin de la concesión hasta el
año 2024, para compensar la deuda que el Ayuntamiento había contraído con la
multinacional. Por su parte, la depuradora de la Almozara ha sido gestionada,
mediante una concesión de servicio, por una filial de ACCIONA.
El balance de estas experiencias de
gestión privatizada no ha sido bueno: ha sido ineficaz en la depuración de los
vertidos, en muchos casos; escasamente transparente, cuando no rotundamente
opaca; y ha adolecido incluso, especialmente en el caso de la Cartuja, de claros
incumplimientos en el mantenimiento de instalaciones, así como en condiciones
laborales irregulares y abusivas.
El 7 de Enero de 2014, a
propuesta de la Red Agua Pública de Aragón (RAPA), en un solemne acto celebrado
en el Ayuntamiento de Zaragoza, los partidos políticos PSOE, IU, CHA y EQUO,
junto a los sindicatos UGT,CCOO y CGT, la Federación de Asociaciones de Barrios,
la Unión de Consumidores de Aragón (UCA), los diversos Colectivos Ecologistas,
la Fundación Nueva Cultura del Agua, ECODES y otras organizaciones sociales,
firmaron el “Pacto Social por la Gestión
Pública del Agua en la Ciudad de Zaragoza y su Entorno”. En dicho documento
se asumían compromisos sustantivos, como los que reproducimos literalmente a
continuación:
“… Los servicios de abastecimiento y
saneamiento constituyen un ciclo integrado cuya gestión debe realizarse de
manera conjunta … Por ello, creemos imprescindible establecer un modelo de
gestión integrada de los servicios y de los ecosistemas de los que tomamos el
agua y sobre los que vertemos nuestros retornos. Dichos servicios no deben ser
gestionados desde la lógica del mercado, … sino desde la gestión pública, sin
ánimo de lucro, como un servicio de interés general… Velaremos por que la titularidad del mismo sea siempre
cien por cien pública … Deberá asegurarse la gestión directa por el
Ayuntamiento de Zaragoza de sus infraestructuras de saneamiento y depuración …
Respecto al frente laboral, el compromiso
asumía que: “… la gestión del ciclo
integral del agua debe ser una oportunidad para la generación de nuevos empleos
…, evitando la precarización de las condiciones de trabajo y de la seguridad de
los trabajadores …”
Y finalmente, respecto al Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración
(PASD) se decía: “ … El PASD ha supuesto una privatización … de los
servicios de saneamiento; ha erosionado la autonomía municipal …; ha generado agravios comparativos entre
poblaciones; y ha dado lugar a la imposición de unas tarifas (ICA) abusivas …
Por ello rechazamos el PASD, y nos oponemos activamente a su implantación en
nuestros Ayuntamientos, en tanto no se haga una revisión en profundidad del
mismo que prevea utilizar tecnologías, adaptadas a cada población, que
requieran menos recursos financieros y menos consumo energético; y preserve la
autonomía municipal …
Por último, además de
apoyar una gestión 100% pública, el documento iba más lejos: “ … Entendemos que no basta garantizar la
gestión pública, sino que es preciso promover nuevas formas de control social y
de democracia participativa, que garanticen transparencia y participación
ciudadana efectiva y proactiva …”.
En lo que a la
eficiencia y al coste de estos servicios, en general, la privatización, en
contraste con los modernos enfoques de gestión pública participativa que
propugnamos, desde la Red Agua Pública hemos venido demostrando a lo largo de
los últimos años, lo que el Tribunal de Cuentas ratificó en 2011: que la
gestión pública de los servicios de agua y saneamiento resulta claramente más
económica y eficiente que la gestión privatizada.
Por todo ello, desde
RAPA apoyamos al Gobierno Municipal en su defensa de los vecinos y vecinas de
Zaragoza frente al intento de la DGA de imponer ya este año el cobro del ICA,
siendo que ya pagamos nuestras depuradoras, como forma de cubrir la quiebra del
oscuro negocio de privatización que ha supuesto el Plan de Saneamiento de
Aragón. Igualmente saludamos la iniciativa de recuperar la gestión pública que
propugna el Gobierno Municipal de Zaragoza, aprovechando el agotamiento de la
concesión de gestión privada que ha estado vigente en la depuradora de la
Almozara. Desde RAPA, por otro lado, apelamos a la seriedad de los partidos
firmantes para que cumplan lo que sus representantes firmaron y comprometieron.
Pero al tiempo, queremos insistir en que, tal y como establece el Pacto
Social por la Gestión Pública del Agua, no basta con garantizar una gestión 100% pública,
sino que es preciso promover un nuevo modelo de gestión pública, integrada, transparente y participativa. Desde
hace años venimos insistiendo en que es necesario un nuevo modelo de gestión
integrada de los servicios de agua y saneamiento en Zaragoza y su entorno; venimos
insistiendo en que ECOCIUDAD, aún siendo formalmente pública, dista mucho de
ser ejemplar en transparencia y participación ciudadana; venimos insistiendo en
la necesidad de garantizar la transparencia y la participación ciudadana en la
gestión de estos servicios.
Por todo ello y en resumen:
1- Agradecemos
y alentamos el compromiso del Gobierno Municipal en la defensa de la gestión
pública de los servicios de agua y saneamiento;
2- Reiteramos
nuestro llamamiento a todos los partidos firmantes del Pacto Social por la Gestión Pública, formen parte o no del Gobierno
Municipal, para que cumplan lo que firmaron;
3- Solicitamos
de la Corporación la formación de una Comisión
Ciudadana que inicie sin demora el diseño de ese nuevo modelo de gestión pública integrada, transparente y
participativa de los servicios de agua y saneamiento que propugna el citado
Pacto Social.
La firma del "COMPROMISO" se recogió así:
Los medios aragoneses recogen esta polémica:
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