La tarde ha congregado en el Centro Joaquin Roncal a tres expertos de la depuración extensiva. Los tres conocen muy bien la experiencia de Fabara que parece proscrita por el oficialismo hidráulico aragonés y que sin embargo lleva prestando servicio eficaz en el municipio aragonés.
Enrique Ortega:
Ingeniero Coordinador del Manual sobre Saneamiento en pequeñas poblaciones.
Jesús Fernández:
Catedrático de la Politécnica de Madrid diseñador de la depuradora de Fabara
Francisco Domenech:
Alcalde de Fabara
Interviene en primer lugar Enrique Ortega que en 2010 coordino la publicación desde el CEDEX de un Manual para guiar el saneamiento en pequeñas poblaciones. La mayoría de las Comunidades Autónomas difundieron en los Ayuntamientos este Manual. Alguna Confederación Hidrográfica, como la del Duero, también lo empleó y difundió. Desgraciadamente Aragón fue la excepción. El Manual quedó prácticamente vetado al conocimiento público y en particular al conocimiento de los Ayuntamientos.
Se habría ahorrado mucho dinero si se hubiera usado como guía este trabajo que fue encomendado y editado por el Ministerio. Ahora parece que en Aragón se empieza a reconocer la validez de estas tecnologías de depuración extensiva, cuyo ejemplo vivo es Fabara y aunque diga el refrán que más vale tarde que nunca, los retrasos en esta materia está costando muchos recursos a los aragoneses.
A continuación, Jesús Fernández comenta como la tecnología de Fabara es reconocida por el Estado de Nueva York como el “modelo FABARA”; tras 10 años de funcionamiento se constata que es uno de los modelos más avanzados en el mundo, pues es capaz de depurar con alto rendimiento a muy bajo coste, al tiempo que digiere los lodos (evitando costes importantes). La eficacia esta contrastada con datos sistemáticos que han sido publicados y validados a nivel internacional en prestigiadas revistas científicas. Es una pena que el Gobierno de Aragón siga ignorando esta experiencia de referencia a nivel mundial que está en Aragón. En su intervención este catedrático emérito ilustra con toda claridad las tipologías de plantas que mejo se prestan para la depuración y las mejores técnicas de mantenimiento que convierten a esta depuradora en un ejemplo de éxito científico y técnico
En un aspecto más ligado a la gestión cotidiana, Francisco Domenech cuenta como hace más de 10 años que funciona la depuradora de Fabara sin apoyo ni subvención de nadie, con una tecnología de la Politécnica de Madrid que hoy es adoptada por el Estado de Nueva York. La instalación ocupa 0,7 hectáreas y tiene capacidad para tratar el saneamiento de 3000 habitantes equivalentes. Supuso una inversión de unos 250.000 € frente a los 2,5 millones €, presupuestados por la DGA y su coste de gestión es de apenas 13.000 €/año, frente a los 180.000 €/año que habría supuesto la depuradora proyectada por el Instituto Aragonés del Agua y la DGA. Sobre la base del control sistemático que hace la CHE de los efluentes se cobra un canon de vertido simbólico, de 300 €/año, frente a los 6000 que cobraba antes. Siendo la experiencia más avanzada en este frente de toda España, Fabara no ha dejado de recibir un sistemático acoso desde la DGA y el Instituto Aragonés del Agua que a pesar de haber asumido la necesidad de introducir importantes cambios en los modelos y técnicas para la depuración de las aguas residuales, siguen sin tolerar la disidencia y capacidad de autonomía municipal de que hace gala este municipio de la comarca de Caspe.
Aquí se puede ver la exposición de Enrique Ortega:
Esta es la presentación que proyectó Jesús Fernandez y que tampoco pudo verse en SMAGUA :
